top of page

8 caminos para criar seres humanos curiosos

La curiosidad es el origen de todo descubrimiento, hito e innovación. A pesar de ser un rasgo inherente a todos los seres humanos, la crianza puede ser un factor determinante en el grado de curiosidad que conservamos en nuestra etapa adulta y productiva.


Si tienes hijos, habrás notado que son naturalmente curiosos. Sin embargo, es posible que, como adultos, pierdan una buena parte de esa curiosidad. Como padre, tal vez te hayas preguntado: ¿hay alguna manera de asegurarnos de que nuestros hijos mantengan esa insaciable curiosidad cuando sean adultos? ¿Es posible que aprendan a cultivarla y a desarrollarla por su cuenta?


La respuesta es sí. Hay mucho que podemos hacer para fomentar y nutrir la curiosidad en nuestros hijos. Para empezar, aquí tienes 8 caminos para criar seres humanos curiosos.


1. El túnel de las preguntas



Cualquiera que conviva con niños sabe que, en general, hacen muchas preguntas. Es común que una pregunta lleve a otra y, después de cuatro o cinco seguidas, a veces se nos termina la paciencia. En realidad, lo mejor que podemos hacer es resistir a la tentación de decir “porque sí” y, al contrario, adentrarnos en el túnel de sus preguntas y seguir con ellos hasta donde su curiosidad los lleve. Esto les enseña que cuestionarnos las cosas es aceptable y positivo.


También puedes ser tú quien genere el túnel de preguntas y dejar que él o ella responda. Este giro resulta estimulante para ellos y les muestra nuevas maneras de cuestionarse las cosas.


2. Lenguaje abierto

La forma de expresarnos puede tener una influencia enorme en los pequeños. Para cultivar y nutrir su curiosidad, hay ciertas frases y formas de lenguaje que puedes utilizar. Estas frases contribuyen a encender la chispa en su mente y los orillan a pensar por sí mismos. Aquí algunos ejemplos:


  • ¿Qué crees que pase si…?

  • He notado que…

  • ¿A qué te recuerda….?

  • ¿Tú qué piensas de…?

  • ¿Cómo llegaste a esa conclusión?


3. Caminatas en la naturaleza

Pocas cosas incentivan la curiosidad por el mundo como una buena caminata en un entorno natural. Desde un bosque o una playa hasta un parque o jardín, cualquier ambiente en donde puedan encontrarse plantas, animales y minerales es efectivo para esta actividad.


Lo importante es respetar el ritmo de los niños, detenerse con ellos cuando estén explorando algo. Dejar que toquen y recolecten hojas, piedras, ramas y bichos. Cuidando este aspecto, también puedes mostrarles cosas interesantes como aves y flores.


4. Experimentos científicos



Una forma de generar asombro que siempre funciona es hacer experimentos divertidos con los pequeños. Actualmente hay muchos recursos en línea para encontrar algunos que son vistosos y sencillos. Hacer estos experimentos es una de las formas más efectivas de despertar el interés por la investigación y las relaciones de causalidad, dos pilares de la ciencia.


Si quieres un poco de inspiración, te recomendamos esta cuenta de Instagram.


5. Actividades de ingeniería


Los niños tienen un lado ingenieril integrado, el cual puede ser explorado y cultivado con actividades y juegos que impliquen construir y armar cosas. El ejemplo más sencillo es hacer edificios con bloques de plástico para ensamblar. También pueden hacer estructuras con palitos o bloques de madera.


Otra forma de incentivar este lado de la curiosidad es involucrarlos en tareas como: reparar un mueble, cambiar una llanta, colgar un cuadro o resanar un agujero en la pared.


6. Sesiones de arte

Todos los niños son artistas y seguramente lo has notado. Proveer espacios y momentos para experimentar con estas inquietudes es satisfacer la curiosidad por la estética, la belleza y la verdad. Manualidades, dibujo, pintura, escultura, música, baile, teatro, etc. son algunas de las avenidas a explorar. ¡El mundo del arte es muy vasto!


La recomendación es intentar actividades con todas estas disciplinas y observar para descubrir cuáles son las que generan más interés en los niños. Estas son las que hay que seguir desarrollando.


7. Diversión con tecnología

Los iPad y smartphones sirven para mucho más que ver películas y videos. Hay una cantidad impresionante de aplicaciones y juegos educativos que pueden avivar el interés de tus pequeños por las posibilidades que brinda la tecnología.


Por ejemplo, esta app es para construir tuberías y ayudar a los niños a desarrollar pensamiento crítico, orientado a la resolución de problemas. Para niños más grandes, puedes experimentar con programación y robótica con kits como este.


8. Viajes

Ya sea que viajen a un pueblo a una hora de camino o a un país desconocido, a los niños les da igual. El simple hecho de cambiar el entorno, descubrir nuevos lugares, olores, sabores y personas, es un gran catalizador de su curiosidad y un estimulante infalible para su intelecto.


En Escuela Libertad estamos comprometidos con desarrollar personas con curiosidad inagotable y hambre de conocimiento. Nuestros programas están orientados a la enseñanza de actitudes, valores y habilidades que equipan a los estudiantes para adaptar la información a la realidad y solucionar problemas. Si quieres saber más sobre nosotros, agenda una cita ahora.



Comments


bottom of page